Las urnas dejaron su sanción. Cabildo Abierto registró una magra votación, pero Irene Moreira, exministra y senadora, se la jugó por su esposo, Guido Manini Ríos, y dijo que su sector tiene buena salud para “seguir peleando por Guido, sus ideales y su verdadera visión artiguista”. “Quisieron matarnos, quisieron matarme”, pero no pudieron.
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El pico de presión
En ese audio, la exministra y esposa del líder cabildante, confesó que no pudo acompañar a Manini Ríos en el acto del domingo a la noche, donde reconoció la magra votación, porque tuvo un “pico de presión” y no tuvo más remedio que hacer reposo.
“Un balde agua fría”
En ese audio, Moreira reconoció que la baja votación le cayó como “un balde de agua fría”. Y agregó: “Esto recién empieza”.
Y arengó a sus correligionarios: “Tenemos la fuerza de tener el orgullo y la alegría de que los dos diputados [Álvaro Perrone y Silvana Pérez Bonavita] que salieron de este partido de Manini son de nuestro sector [Todos con Manini]
Muy buena salud
Esto, agregó Moreira, “no terminó acá”. “Hay una vieja frase que dice: ‘Aquellos que vois matáis gozan de buena salud’. Pues quisieron matarnos, quisieron matarme pero hemos demostrado que tenemos muy buena salud para seguir peleando por Guido, sus ideales y su verdadera visión artiguista”.
Y remató: “Quizá de esta forma muchos de los que se tendrían que haber retirado, muchos de los que tendrían que haber pedido perdón por generar está fractura y no lo están haciendo, y bueno, esto también puede servir para limpiar un poco la casa”