Total y absoluto respaldo al Intendente de Salto, Carlos Albisu, y al Secretario General, Walter Texeira Nuñez, en la designación del Ing. Juan Manuel Texeira al frente de la Dirección de Obras.
No solo por tratarse de una persona de sobrada y probada capacidad técnica y compromiso, sino porque detrás de este episodio se esconde algo mucho más preocupante: el uso político de una institución que debería ser seria, imparcial y al servicio de todos los uruguayos. Además de la sorprendente celeridad de acción con la que el tema se tomó.
La JUTEP no está tomando una resolución seria. Está actuando con un claro sesgo político-partidario, transformándose en una herramienta de ataque contra un gobierno departamental que está haciendo las cosas bien.
Y eso no solo es injusto: es peligroso para la institucionalidad.
Porque acá no hay nada ilegal, ni nada turbio. Lo que hay es un equipo de trabajo que deja el alma en la cancha, que está enfrentando una situación económica muy difícil y que, a pesar de todo, avanza con rumbo claro.
Y parece que eso molesta.
Es curioso que todo esto ocurra en pleno conflicto con el gremio municipal.
Más curioso aún que quienes encabezan la JUTEP pertenezcan al mismo partido político que los principales referentes del sindicato y que, además, gobernaron Salto en el pasado.
¿Casualidad? No lo parece.
Utilizar una institución del Estado para atacar a un gobierno por razones políticas es grave.
Porque erosiona la confianza ciudadana y desnaturaliza el sentido de organismos que deben ser garantes de transparencia, no herramientas de revancha.
En Salto hay un gobierno que trabaja con honestidad, con transparencia y con resultados.
Y desde mi lugar, reitero: todo mi respaldo al Intendente Carlos Albisu, al Secretario General Walter Texeira y al Director de Obras Ing. Juan Manuel Texeira.
Porque cuando las cosas se hacen bien, hay que decirlo con claridad, y cuando intentan ensuciarlas, hay que salir a defenderlas.
En Salto todos sabemos quién es quién.
Facundo Marziotte
Edil Departamental